Apendicitis

-¡José Luis, dame un abrazo!

-Antonio, ya ni me acuerdo de la última vez que coincidimos.

-¿Cómo lo llevas?

-Bueno, vamos sobreviviendo. Espera, me dijo Txema que te habían operado de apendicitis, ¿no?

-En realidad no, fue algo más grave.

-Pues yo estoy convencido de que me dijo apendicitis.

-No, todo empezó con un dolor abdominal pero después me hicieron más pruebas y…

-Es rarísimo porque recuerdo que pensé que a mí también me habían operado de lo mismo de niño.

-Al final no encontraron nada y me hicieron una biopsia, y bueno lo cierto es que…

-Sí, sí, me dijo apendicitis, pero seguro. Ya sabes que te llevas un susto pero si te lo pillan a tiempo no hay peligro.

-Bueno, ojalá fuera eso, el caso es que tengo cáncer de estómago. Me abrieron pero no pudieron hacer nada.  Está muy avanzado, con metástasis, inoperable. Me han dado unos meses de vida.

-Antonio, escúchame. El médico te podrá haber dicho misa, pero yo te juro por mi difunto padre que escuché apendicitis. Te han operado de apendicitis, lo habrás entendido mal, ya sabes que utilizan un lenguaje lioso, tú también estarías nervioso.

-Joder, José Luis, que estoy desahuciado, me estoy muriendo.

-Antonio, espabila un poco, ¿vas a creer a un médico que no conoces de nada o a tu amigo José Luis? Te estoy diciendo que escuché apendicitis. Reacciona, macho, reacciona, que yo te veo de puta madre.

-Si tú lo dices.

-Bueno, Antonio, me voy que llego tarde. He quedado con Teresa para comer.

-¿Con Teresa, tu hermana? ¿Cuándo has hablado con ella por última vez?

-Ayer mismo hablamos por teléfono, ¿por?

-¿No has oído la radio esta mañana?

-No, no, me he dormido y he andado a la carrera desde que me he levantado, fíjate que me he olvidado hasta el móvil en casa. ¿Ha pasado algo?

-Nada, nada, un accidente en la autovía, una chica muerta. Han dado su nombre pero no me sonaba de nada.

-Qué tragedia, chico, hay que aprovechar cada momento porque nunca se sabe cuándo te puede tocar. En fin, Antonio, me largo que llego tarde.

-Nada, pasadlo bien y dale un beso a Teresa de mi parte.

-Se lo daré. Hasta otra, Antonio.

-Hasta otra.

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