La rigidez del feriante
Una mujer se acerca corriendo a la ventanilla de los autos de choque.
-Perdone, he perdido el bolso. En el bolso tengo unos medicamentos que tiene que tomar mi hijo cada hora para evitar un ataque epiléptico. Ayúdeme a encontrarlo, ¡por favor!
El feriante levanta la vista de su móvil, apaga el cigarro, enciende otro, se lo fuma con calma, lo apaga, crea un grupo de Whatsapp pidiendo el regreso de Azúcar Moreno, rellena una primitiva, se va a sellarla, vuelve, enciende un cigarro, se lo fuma con calma, lo apaga, enciende otro y señala el cartel.