Diez negritos
Juzgados de Palma de Mallorca. El juez Castro entra en la sala, se sienta y comienza a hablar.
Juez Castro: Os recuerdo que está prohibida la grabación de imagen o sonido durante la declaración de doña Cristina de Borbón. Cualquiera que tenga introducido un dispositivo grabador en la vagina, en el recto o en el prepucio deberá abandonar la sala inmediatamente.
Nadie mueve un músculo.
JC: Se estaría cometiendo un delito de desobediencia y acarrearía importantes multas económicas e incluso pena de prisión.
Una mujer, un enano y un hombre que guarda un asombroso parecido con Eduardo Inda se levantan y caminan a paso rápido hacia la puerta.
JC: Quizás me he explicado mal, si el dispositivo que graba imagen o sonido no se encuentra introducido en la vagina, en el recto o en prepucio, también es delito.
Unas 10 personas se levantan y se dirigen a la salida sin quitar la vista del suelo.
JC: A ver si consigo decirlo bien, si el dispositivo graba imagen o sonido es delito, pero si graba imagen y sonido a la vez también es delito.
Un grupo no inferior a 20 personas se abalanza hacia la puerta. Solo queda sentado un hombre vestido con gabardina, lleva en la cara una máscara de V de Vendetta y lee un periódico del revés.
JC: Muy bien, comencemos la declaración.
El periódico es el Mundo fijo, por lo de Agatha
David, estás hilando tan fino que me das miedo.
Anonymous ofendido dice:
– Claro que leía el periódico… Miraba del revés la única oferta laboral incluida: “sofargílob odnatnom asac edsed ejabarT” a ver si así se me hacía más atractiva…
cio, a mí me has convencido, iré a grabarte cuando testifiques para el juez Castro.
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